TURISMOFOBIA

Mensaje de los ciudadanos a los turistas

Vivir en Madrid, Palma o Barcelona todo el año resulta, para la mayoría de la gente, maravilloso. Una rutina marcada y un día a día típico de las grandes ciudades pero estas ciudades están expuestas a una gran masividad turística lo que provoca en los habitantes de estas ciudades una turismofobia, este termino se ha puesto de moda precisamente este verano.

La llegada de oleadas de turistas se ha convertido en un problema para las grandes ciudades no solo españolas, sino también de todo el mundo.

Calles masificadas en Barcelona

España es uno de los destinos preferidos para millones de personas y parece que el sistema no soporta tal cantidad de personas. Hoteles llenos, playas a rebosar, calles llenas de  móviles y cámaras sacando fotos continuamente por lo que hay poca tranquilidad y normalmente, una agitada vida nocturna que afecta a todos los vecinos de la zona. Esos son algunas de las consecuencias de los desplazamientos incontrolados que como se está viendo no siempre y cada vez menos tienen una conducta adecuada ya que vienen de fiesta a montar escándalos, peleas y sobre todo el malestar de los ciudadanos.

Hay otra preocupación que afecta al  cuidado de la naturaleza. El auge del turismo provoca más urbanización en zonas que no están ni preparadas para tal cantidad de turismo. Tiene por tanto efectos sobre los ecosistemas. Esto tiene especial relevancia en las zonas costeras, sobre todo en las islas: Ibiza, Mallorca, Tenerife. Son destinos cada vez más solicitados en los que las ofertas hoteleras superan con creces a cualquier otro tipo de actividades.




Pero el rechazo al  turismo que impera en el mundo se ha extendido también a otras grandes ciudades. Es el caso de Venecia entre otras. Una ciudad que existe y quiere resistir a la masividad de turistas y continuar con su vida cotidiana.
 Estamos aquí y queremos seguir viviendo aquí, proclamaron los vecinos que marcharon en septiembre de 2016 contra el turismo masivo. "Queremos recuperar nuestra ciudad" era el lema que lideraba la marcha.